Rodeado de altas montañas, el balneario de Cauterets, conocido por sus aguas beneficiosas, ha conservado una arquitectura típica del siglo XIX. De ello dan fe los hermosos edificios Belle Epoque que se descubren a lo largo de un paseo, como por ejemplo, el Gran Hotel de Inglaterra y el Gran Hotel Continental.
Las Termas de Cauterets están especializadas en el tratamiento de las vías respiratorias y la reumatología, pero también ofrecen estancias de puesta en forma y de cuidados estéticos.
En el aspecto cultural, el Museo 1900, instalado en el marco fastuoso del antiguo Gran Hotel de Inglaterra, alberga colecciones de arte y de tradiciones populares, así como una exposición permanente dedicada al esquí y al alpinismo, desde 1850 hasta nuestros días.
En cuanto a la naturaleza, la ciudad termal cuenta con un entorno montañoso excepcional, y se beneficia de su proximidad a sitios naturales extraordinarios, como el Puente de España o el lago de Gaube. La Casa del Parque Nacional de los Pirineos de Cauterets acoge regularmente proyecciones y exposiciones relacionadas con la montaña.
El berlingot es una especialidad de Cauterets. Este famoso caramelo de colores, que antiguamente utilizaban los agüistas para disminuir el sabor del agua sulfurada, se sigue fabricando hoy en día de forma artesanal... ¡y continúa haciendo las delicias de grandes y pequeños! Varias fábricas de la ciudad termal ofrecen degustaciones del producto y demostraciones de su elaboración, que se remonta al siglo XIX.